Autor: IKI Alliance
En 2023 LACADI fortaleció su posicionamiento en México y Perú, gracias a todo el trabajo desarrollado de la mano de los inversionistas institucionales de estos países.
En términos de fortalecimiento de capacidades, LACADI reunió presencialmente a 70 personas entre representantes de aseguradoras y fondos de pensión de México y Perú, y voceros de entidades reguladoras del sistema financiero de estos países, Colombia y Brasil. En este primer Encuentro Regional hubo reflexión e intercambio de conocimientos alrededor de la necesidad de conocer las oportunidades y riesgos del cambio climático en la toma de decisiones de inversión.
También en 2023 LACADI presentó los resultados del cuestionario autodiagnóstico para revelar el avance en la implementación de las recomendaciones del TCFD sobre divulgación de información financiera relacionada con el clima. Para el caso de México, participaron el 31% de los activos administrados por los fondos de ahorro para el retiro o afores y el 29% de los activos administrados por aseguradoras mexicanas.

Sesión con reguladores del sector financiero de Colombia, México y Perú – Colombia, Mar. 2023
Incidir para decidir
Con base en los resultados del cuestionario, LACADI desarrolló recomendaciones personalizadas para 22 inversionistas institucionales de México y Perú, un insumo fundamental para que estas compañías tomen acción y sean climáticamente inteligentes.
Además se realizaron 11 estrategias de seguimiento con igual número de compañías, para acompañar el proceso de implementación de las recomendaciones entregadas.
En términos de material de interés, LACADI consolidó un banco de 29 publicaciones con información técnica e informativa en acceso abierto y gratuito disponibles en el sitio https://lacadi.transforma.global/hitos-y-resultados/

Asistentes al Encuentro Regional LACADI 2023. Colombia, Mar. 2023
Alianzas y el panorama 2024
LACADI estableció alianzas de valor con iniciativas como UNEP FI, LEDS LAC, la GIZ y el Consejo Mexicano de Finanzas Sostenibles, entre otras. Este trabajo sumó al propósito de la Iniciativa y permitió desarrollos colaborativos para la construcción de capacidades de los inversionistas institucionales.
En 2024, LACADI busca iniciar su segunda fase para:
- Desarrollar un ranking que aumente su alcance en inversiones y países.
- Continuar construyendo capacidades con otros actores en la región.
- Crear conciencia en clientes finales y reguladores sobre su rol en términos de divulgación climática.
- Promover la eliminación de barreras que permitan que el sector financiero le apueste a inversiones climáticamente inteligentes.
En sus primeros meses, el proyecto SAbERES realizó reuniones de arranque con los gobiernos de Campeche, Chiapas, Hidalgo, Oaxaca y Tabasco para presentar las acciones que desarrollará para apoyar la adaptación al cambio climático de pequeños productores agrícolas, ganaderos y forestales.

Agricultura regenerativa del Grupo Vicente Guerrero en Tlaxcala. Créditos: Iván Zúñiga.
Como parte de la primera etapa, el Grupo Autónomo para la Investigación Ambiental (GAIA), socio del consorcio, ha iniciado en colaboración con el Grupo Vicente Guerrero de Tlaxcala, el pilotaje de prácticas de Adaptación basada en Ecosistemas (AbE) para la agricultura de temporal con buenos resultados ante la sequía que se presentó en la región.
Además, organizaciones de Oaxaca, Chiapas, Hidalgo y Tlaxcala han iniciado la formulación de Planes de Adaptación al Cambio Climático quinquenales, basados en prácticas AbE para los sistemas de producción de maíz, café, agave, miel, forestal y cultivos agroecológicos. Estos planes fijarán la hoja de ruta del proyecto en las regiones de implementación durante el periodo 2024-2027.

Presentación y acuerdos con la Secretaría de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambio Climático y Energía de Campeche (SEMABICCE). Créditos: SEMABICCE 2023.
Para evaluar los cambios logrados por el proyecto y garantizar avances en la adaptación de los productores involucrados, se desarrolló una primera versión del Índice de Capacidad de Adaptación de Pequeños Productores, que incluye seis dimensiones y más de treinta indicadores de fácil monitoreo. Este Índice será probado durante diciembre y se espera que también sirva para evaluar los resultados de otros proyectos en el futuro.
A la par, se está trabajando en el desarrollo del Sistema de Gestión Ambiental y Social (SGAS), el Plan de Acción Ambiental y Social, y en la formulación de un Plan de Acción de Género, Equidad e Inclusión para asegurar el cumplimiento de metas y que mujeres, hombres, y grupos vulnerables, se beneficien por igual del programa al tiempo que se promueve su participación efectiva en las organizaciones de productores.

Prácticas agroecológicas en El Mandimbo, Oaxaca. Créditos: Iván Zúñiga.
Por último, se realizaron dos investigaciones que serán publicadas en 2024, la primera mapea casos de estudio y propone criterios para la implementación de modelos de gobernanza comunitaria en sitios piloto del proyecto; y la segunda analiza aspectos teóricos de AbE y alternativas para su inclusión directa o indirecta en las políticas públicas del país.


Lago Chapala, uno de los más antiguos del mundo, con casi 7 millones de años de existencia. Créditos: CANVA.
El Lago de Chapala es el cuerpo natural de agua más grande de México. Es uno de los ecosistemas lacustres más antiguos del planeta (casi 7 millones de años), con una enorme biodiversidad, y fuente de servicios ambientales como agua (para consumo humano e irrigación), pesca y regulación climática, entre otros. Es también un espacio sujeto a enormes presiones que ponen en riesgo su capacidad de proveer dichos servicios para 4 millones de personas.
Uno de los problemas que amenazan a este ecosistema acuático es la contaminación por pesticidas, provenientes de la agricultura mecanizada, que se práctica en 40% del territorio de la cuenca. Más de 50% de dichos pesticidas tienen efectos de alta y extrema toxicidad sobre el plancton, que es la base de la vida del lago; en los peces, lo que perjudica fuertemente a las comunidades locales que dependen de la pesca, y también amenaza la biodiversidad acuática, rica en especies endémicas. Asimismo, estas sustancias tóxicas afectan a las 307 especies aves que habitan el lago y su área circundante.
La agricultura química utiliza también fuertes cantidades de fertilizantes industriales, de los cuales una proporción importante no es aprovechada por los cultivos y acaba en el Lago Chapala, arrastrada por la lluvia. Esto provoca la abundancia de plantas flotantes, como el lirio acuático, que se ha convertido en un obstáculo para la navegación y el turismo, y provoca la presencia cada vez más constante de “explosiones de algas”, que pintan el agua de verde y generan fuertes alteraciones en el ecosistema, particularmente peligrosas cuando se trata de cianobacterias.
Es una prioridad reducir de forma sustancial el arrastre de fertilizantes químicos y pesticidas que alcanzan al lago a través de arroyos y ríos; dicha prioridad se está atendiendo como parte del proyecto Living Lakes Climate and Biodiversity, cofinanciado por la Iniciativa Climática Internacional (IKI) y operado en México por el Instituto Corazón de la Tierra (ICT).
Para hacer frente a esta fuerte problemática se han identificado vías de contención y solución.

La contaminación por pesticidas y fertilizantes provoca infestaciones de plantas flotantes que generan alteraciones al ecosistema. Créditos: Héctor Arcinéga, Instituto Corazón de la Tierra.
Prácticas que favorecen los medios de vida de pobladores locales y al Lago Chapala
Mejorar las prácticas agrícolas y ganaderas es clave para resolver el elevado ingreso de sustancias agroquímicas al lago. La aplicación de buenas prácticas de nutrición y cuidado de los cultivos implica involucrar a los productores locales, para reflexionar y reaprender la forma en que funcionan los agroecosistemas, elaborando productos libres de químicos nocivos mediante el uso de materiales locales, de bajo costo y fácil acceso.
Con estas acciones también se reducen las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, se mejoran las condiciones para la biodiversidad del lago y su cuenca, y se incrementan los beneficios que obtienen los productores que habitan los alrededores de las Sierras de Chapala, al reducir sus costos de producción y limitar los riesgos a su salud.
Finalmente, las Sierras de Chapala son claves para asegurar la recarga de agua para el lago y para los mantos acuíferos.
Para el Instituto Corazón de la Tierra, socio en México del Proyecto Living Lakes Climate and Biodiversity, estos temas son clave para mejorar los ecosistemas acuáticos, conservar suelos, cuidar la biodiversidad, reducir las emisiones a la atmósfera y asegurar la preservación de los servicios ambientales asociados al lago y a sus montañas adyacentes.

Impartición de taller de buenas prácticas agroecológicas por parte del equipo del ICT con productores de las Sierras de Chapala. Créditos: Héctor Arcinéga, Instituto Corazón de la Tierra.
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El ICT trabaja con más de 120 agricultores, agrupados bajo la modalidad de Escuelas de Campo (ECA), para acompañar su aprendizaje y la aplicación de Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) en sus terrenos, aledaños a las Sierras de Chapala. En las ECA los integrantes aprenden a elaborar sus propios productos agrícolas, intercambian experiencias, reflexionan sobre la conservación de bosques y agua, además de mejorar su organización.
Otras metas del ICT con este proyecto son: aplicar el aprendizaje agroecológico y de ganadería regenerativa en 1,000 hectáreas alrededor de dos Áreas Naturales Protegidas (ANP), para crear Cinturones de Amortiguamiento productivo; abrir nuevas escuelas y mantener la capacitación a productores, crear una Mesa Interinstitucional de Producción Alternativa y conformar dos Consejos de Gestión de ANP que integren a los pobladores en la toma de decisiones para cuidar y utilizar sustentablemente esos bosques.
El Instituto Corazón de la Tierra trabaja en la región desde hace más de 20 años, realizando un trabajo comunitario fino que ha implicado ganar la confianza de los agricultores; identificar y reconocer sus saberes; acompañarlos en estos procesos de aprendizaje para que ellos mismos puedan reconocer las ventajas ambientales y económicas de dejar de usar fertilizantes químicos porque:
“No es posible tener un lago sano, en una cuenca degradada”.

Portada del Manual de Buenas Prácticas Agroecológicas elaborado por el Instituto Corazón de la Tierra.
El objetivo del proyecto Costas Listas fue fortalecer las capacidades de adaptación al cambio climático de comunidades costeras de la Península de Yucatán. La conservación y restauración de ecosistemas es una solución basada en la naturaleza. En ambientes costeros, la conservación de ecosistemas como manglares, dunas costeras, arrecifes coralinos y pastos marinos es clave pues reduce la vulnerabilidad de las comunidades a los impactos del cambio climático como la inundación y erosión.

Como parte del proyecto, se identificó un portafolio de medidas de adaptación basadas en ecosistemas. A partir de un proceso participativo, se priorizó la restauración de dunas costeras en sitios clave de Yucatán y Quintana Roo.
Inicialmente, se realizó un diagnóstico de los sitios a intervenir para entender las condiciones de las dunas en cada sitio, así como la factibilidad de implementar acciones de restauración. A partir de dichos diagnósticos, se diseñó un plan de acción para cada localidad. En paralelo, se impartieron talleres comunitarios con el fin de desarrollar capacidades para la restauración.
Más adelante, se instaló un vivero para la propagación de plantas de dunas costeras y la revegetación en las zonas degradadas. El vivero se construyó en las instalaciones de la CONANP en la Reserva de la Biosfera El Cuyo. En él, se alcanzó una producción de 17,500 plantas de 8 especies.
Tras un trabajo de monitoreo que se realizó 5 meses posterior a las acciones de restauración, se determinó que los sitios en donde se realizó la restauración se observó un aumento de la cobertura del 70 %, mientras que en los sitios control se observó un aumento del 6 %, lo que indica que el trabajo de restauración fue exitoso.

El proyecto SiCEM de la GIZ México sostuvo el jueves 26 de octubre el conversatorio “Acelerar el cambio: La Fijación Subnacional del Precio al Carbono como Motor de la Mitigación” en la Semana del Clima de América Latina y el Caribe 2023 organizada por la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático. Contó con la destacada participación de líderes gubernamentales de Guanajuato, Querétaro, Québec, y Panamá.
Algunos de los puntos clave que destacan son la importancia de la transparencia y la participación tanto del sector público como el privado, en el proceso de implementación de instrumentos de precio al carbono. Dorsa Sabet-Rasekh especialista técnica en mitigación de cambio climático de Panamá enfatizó la necesidad de involucrar e informar a la ciudadanía en la construcción de estos instrumentos. Además, mencionó que el proceso de planeación del Sistema de Comercio de Emisiones (SCE) de Panamá cuenta con apoyo técnico de Quebec y California, lo que demuestra que la colaboración internacional y el intercambio de experiencias son fundamentales para el éxito de estas iniciativas.

Jonas Russbild director del proyecto SiCEM, junto a Philippe Grégoire de Québec y Dorsa Sabet- Rasekh de Panamá. Créditos: GIZ México.
Desde el estado de Querétaro, el Subsecretario de Medio Ambiente Ricardo Torres compartió la experiencia de dicha entidad en torno a su impuesto a las emisiones, que busca constituirse como un mecanismo de financiamiento para la acción climática y la transición verde que incentive a las empresas a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. La estrategia de Querétaro incluyó un mapeo de los socios y aliados, enfatizando el entendimiento y el aprovechamiento de las particularidades subnacionales dependiendo las necesidades y condiciones de cada estado.
Estos esfuerzos se alinean con el enfoque gradual y transparente mencionado por Alberto Carmona; Subsecretario de Gestión Ambiental, Cambio Climático y Sustentabilidad Energética del estado de Guanajuato. Carmona enfatizó la necesidad de involucrar a las empresas desde la etapa de planeación de los instrumentos de precio al carbono, asegurando un diseño conjunto del impuesto y, por ende, la construcción de la confianza necesaria para una implementación efectiva y la disminución de reacciones negativas hacia la operatividad.

Ponencia virtual por parte de los subsecretarios representantes de Querétaro y Guanajuato. Créditos: GIZ México.
Philippe Grégoire, Asesor de Cambio Climático y Asociaciones Internacionales en Québec, enfatizó la necesidad de contar con instrumentos de medición de compensación confiables para garantizar la reducción comprobada de las emisiones de gases de efecto invernadero, por ejemplo, el impulso a proyectos forestales en esta jurisdicción. Posteriormente, Philippe presentó el trabajo que se realiza a través de la iniciativa Carbon Pricing for the Americas (CPA), la cual funciona como una plataforma regional de colaboración y creación de redes para la fijación de precios al carbono que reúne a gobiernos nacionales y subnacionales, así como el apoyo de instituciones especializadas y organizaciones sin ánimo de lucro.
Además del conversatorio, el proyecto del equipo SiCEM mantuvo una reunión de trabajo con el equipo de la iniciativa CPA, para explorar temas a favor del desarrollo y evolución de los instrumentos de precio al carbono en México y otros países de la región, de modo de identificar posibles sinergias y colaboraciones efectivas para la sostenibilidad de dichos instrumentos.
El proyecto SICEM impulsa medidas de transferencia internacional de conocimientos e intercambio con gobiernos que implementan o diseñan instrumentos respecto a un precio al carbono. Este conversatorio fue un testimonio claro de la determinación de América Latina y el Caribe para abordar el cambio climático de manera colaborativa.
El Sistema de Comercio de Emisiones (SCE) de México es el primero en su tipo en América Latina y el Caribe. Después de la publicación en 2020 del Acuerdo por el que se establecen las Bases Preliminares del Programa de Prueba del Sistema de Comercio Emisiones en México, se contó con una primera regulación para su fase piloto y su fase de transición, misma que concluyó en diciembre de 2022.

El Sistema de Comercio de Emisiones como estrategia para la reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Créditos: Pcess609 iStock Photo.
Uno de los componentes más importantes de dicha regulación fue la puesta en marcha de un Comité Consultivo del SCE (COCOSCE), como órgano técnico de carácter permanente de consulta, orientación, participación social y asesoría de la Administración Pública Federal en materia de comercio de emisiones. El COCOSCE se reúne en diferentes momentos del año, por convocatoria de la SEMARNAT, que actúa como Secretaría Ejecutiva del Comité.
En el marco de este instrumento, el proyecto SiCEM de la GIZ ha participado en calidad de invitado al intercambio de perspectivas y orientaciones técnicas para el seguimiento a los preparativos para la implementación de una Fase Operativa para el SCE de México y su regulación. El COCOSCE reúne a diversos representantes de la Administración Pública Federal, Empresas Productivas del Estado Mexicano, sectores regulados por el SCE, sociedad civil y academia, y funge como un órgano técnico de consulta, orientación, participación y asesoría en materia de comercio de emisiones.

Diálogo técnico con actores clave del Sistema de Comercio de Emisiones. Créditos: SiCEM-GIZ y SEMARNAT.
El proyecto SiCEM busca continuar brindando acompañamiento técnico a la SEMARNAT para el fortalecimiento de las condiciones institucionales y técnicas, para que el SCE sea una herramienta clave en la consecución de las metas de mitigación y los compromisos climáticos que ha adoptado México. Asimismo, SiCEM continuará impulsando el diálogo entre el sector regulado y la autoridad del SCE para facilitar procesos de intercambio e impulsar una formulación efectiva de propuestas que abonen al alcance de las metas climáticas nacionales.

Diálogo técnico con actores clave del Sistema de Comercio de Emisiones. Créditos: SiCEM-GIZ y SEMARNAT.
El pasado 17 de octubre se llevó a cabo la 25° Reunión del Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico, Técnico y Tecnológico (SBSTTA) del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD), donde México compartió avances en su Estrategia Nacional sobre Biodiversidad, con alineación al Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal. El SBSTTA es un órgano establecido en 1994 y que proporciona a la COP recomendaciones técnicas y científicas oportunas para la implementación del CBD.

25° Reunión del SBSTTA. Créditos: GIZ.
En el evento se destacó la creación de sinergias entre las agencias de cooperación y los países latinoamericanos. La Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana), a través del proyecto de la Alianza Mexicana-Alemana de Cambio Climático, y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) participaron en el evento fomentando el diálogo, el intercambio de conocimientos y la creación de redes entre las y los participantes.
Al evento asistieron delegaciones de varios países de la región como Colombia, Costa Rica, Chile, Perú y México, por lo que se lograron identificar lecciones aprendidas y oportunidades para mejorar la cooperación y el desarrollo de capacidades en la región de América Latina.
Esta reunión ayudó a enfatizar la importancia de la colaboración global en la protección y conservación de la biodiversidad, así como explorar oportunidades para potenciar una mayor cooperación entre los países de la región y de las organizaciones internacionales.
El mundo se encuentra en una crisis climática urgente. En este contexto, los instrumentos de precio al carbono se han destacado como herramientas cruciales para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. En México se destacan a nivel estatal la existencia de siete instrumentos activos y cuatro nuevas iniciativas, mientras a nivel federal se implementa un Sistema de Comercio de Emisiones (SCE).
Esta diversidad de enfoques sobre los instrumentos de precio al carbono abre oportunidades para el diálogo entre el Gobierno Federal y gobiernos subnacionales en México sobre la gobernanza de este tipo de instrumentos en el país. En este marco, el Proyecto «Preparación de un Sistema de Comercio de Emisiones para México» (SiCEM) implementado por la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana) organizó el “Diálogo Interinstitucional y Estatal de Instrumentos de Precio al carbono”.

Foto grupal de las personas asistentes al Diálogo Interinstitucional y Estatal de Instrumentos de Precio al carbono”. Créditos: GIZ México.
Durante este diálogo, representantes de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) compartieron sus perspectivas sobre las iniciativas de instrumentos de precio al carbono a nivel subnacional. La sesión fungió como una plataforma para impulsar el diálogo entre actores interesados en la implementación de un instrumento o en alguna fase de esta. También fue un escenario en el que se compartieron experiencias concretas sobre cómo estas iniciativas subnacionales pueden coexistir con el SCE. En este contexto, se exploraron los desafíos únicos que enfrentan las entidades subnacionales y cómo estas pueden aprovechar las oportunidades dentro del marco del SCE. Además, se identificaron sinergias cruciales que fortalecerán la implementación actual de estos instrumentos y sentarán las bases para un diálogo continuo y colaborativo en el futuro.

Philipp Schukat, director del Clúster Clima de la GIZ México, en la apertura del evento, acompañado del Dr. Agustín Ávila, director general de Políticas para la Acción Climática en la SEMARNAT. Créditos: GIZ México.
El diálogo proporcionó información sobre los instrumentos existentes y ofreció una visión sobre su interacción en el contexto local. Los participantes contribuyeron a la creación de estrategias concretas que pueden permitir integrar un plan de trabajo en donde distintos estados generen sinergias técnicas, regulatorias y, en una última instancia, favorezcan una armonización de dichos instrumentos siempre observando las características locales donde se implementan. En los próximos meses los actores involucrados continuarán la conversación para definir actividades de colaboración conjuntas, que atiendan necesidades y oportunidades en distintos ámbitos para impulsar instrumentos de mitigación efectivos y que consideren sus principales efectos sociales y ambientales. El proyecto SiCEM continuará brindando acompañamiento a este intercambio.
En el evento participaron alrededor de 23 autoridades estatales de distintas entidades federativas como Querétaro, Guanajuato, Aguascalientes, Estado de México, Durango, Ciudad de México, Tamaulipas, Chiapas, Campeche, Sonora, Coahuila, Baja California Sur, Colima, entre otras, así como representantes de la Dirección General de Políticas de Acción Climática de SEMARNAT y de la SHCP. Síguenos para próximas actividades de esta conversación.

Ponencia del director del Proyecto SiCEM Jonas Russild con Carl Heinz Subsecretario de la SEDUMA Tamaulipas. Créditos: GIZ México.
«No estamos aquí para hacer acto de presencia; estamos aquí para hacer la diferencia». Con estas palabras de María Isabel Ortiz, Presidenta de la Asociación Nacional de Autoridades Ambientales Estatales (ANAAE) y Secretaria de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial del Estado de Guanajuato (SMAOT), dio inicio el tercer diálogo climático organizado por la Embajada de Alemania en México, donde diversos representantes del sector de medio ambiente y sustentabilidad de las entidades de la República Mexicana se reunieron para coordinar una estrategia de acción en territorio rumbo a la COP 28.
Asimismo, se buscó promover ante instancias supranacionales la importancia del actuar subnacional, así como la articulación de alianzas que promuevan la implementación conjunta de intervenciones clave para combatir la crisis climática en México.

Participantes en el tercer diálogo climático “Las entidades subnacionales en la COP 28”.
La inauguración del evento contó con la presencia del embajador de Alemania en México, Wolfgang Dold; la presidenta de la ANAAE, María Isabel Ortiz Mantilla; y Silvia Giorguli Saucedo, presidenta del Colegio de México.
El embajador Dold afirmó que la importancia del diálogo radicaba en que “acorde a Naciones Unidas, 80% de las acciones del Acuerdo de París son o serán implementadas a nivel subnacional”.
Por su parte, Silvia Giorguli resaltó que el diálogo ayudará a la conformación de redes para lograr avances en la agenda climática. Además, representantes de las entidades subnacionales de Alemania y Colombia se sumaron al llamado por la consolidación de una transición justa en el contexto subnacional.

Inauguración del tercer diálogo climático “Las entidades subnacionales en la COP 28”.
A través de mesas de trabajo divididas en 4 temáticas: cambio climático y energía; industria y empleos; inversión y finanzas sostenibles; y cultura y comunidad, representantes de los gobiernos subnacionales conversaron sobre sus experiencias, del gran potencial que tienen sus estados, así como áreas de oportunidad para implementar mejor la agenda climática.

Mesas de trabajo tercer diálogo climático “Las entidades subnacionales en la COP 28”.
Los resultados de este diálogo se presentarán durante la Semana del Clima que se llevará a cabo del 23 al 27 de octubre en la ciudad de Panamá, siendo la base para fortalecer el posicionamiento de los gobiernos subnacionales rumbo a la COP 28.
Este evento representa un importante parteaguas para la generación de alianzas estratégicas entre gobiernos subnacionales de América Latina y el Caribe; donde la experiencia de la ANAAE en México se vuelve referencia regional y una gran oportunidad para consolidar un actuar coordinado en combate a la crisis climática y de pérdida de biodiversidad a nivel subnacional.