Durante el año 2019, se identificaron las áreas de mejora en la evaluación socioeconómica de proyectos de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (RSU), en particular las metodologías realizadas por el Centro de Estudios para la Preparación y Evaluación Socioeconómica de Proyectos (CEPEP), el Programa de Financiamiento de Infraestructura Baja en Carbono en las Ciudades (FELICITY) de la Deutsche Gesell­schaft für Internationale Zusammenarbeit  (GIZ) GmbH (Cooperación Alemana al Desarrollo Sostenible) con apoyo de la consultoría PIAPPEM. Dichas metodologías ayudarán a los municipios en la toma de decisiones para la realización de proyectos.

 

Créditos: Felicity. propia. Banner del Evento

 

En el mes de noviembre, CEPEP y FELICITY coorganizaron espacios de intercambio de experiencias ampliamente enriquecedor para todos los participantes ya que existió un ambiente de diálogo y de experiencias compartidas para fortalecer las capacidades del sector.

 

Créditos: Itzel Alcerreca. Intervenciones del Titular de la Unidad de Inversiones de la SHCP, Jorge Nuño Lara (izquierda) y de Helge Arends, Director de Programa Agenda 2030 de la GIZ (derecha).

 

El 19 de noviembre se realizó el primer Encuentro Técnico sobre preparación y evaluación de proyectos; evento que fue coorganizado por el CEPEP y FELICITY. Durante el evento, se tuvo una participación del Jorge Nuño Lara, Titular de la Unidad de Inversiones de la SHCP y Helge Arends de Director de Programa Agenda 2030 de la GIZ.

Dentro de las ponencias destacaron temas como:

  • Estrategias nacionales de financiamiento, ejemplos de casos subnacionales así como los retos y los volúmenes de apoyos no recuperables que el PRORESOL puede aportar a proyectos de infraestructura de Gestión Integral de RSU; dado por Carlos Puente; Director de Energía, Medio Ambiente y Agua del FONADIN
  • Ponencias Internacionales; Chile representado por Eduardo Contreras, especialista en la evaluación de proyectos de la Universidad de Chile, el cual resaltó el valor del análisis multicriterio como una herramienta para localizar y evaluar los costos y el representante de Costa Rica, William Maroto el cual nos presentó casos de éxito de proyectos de Gestión Integral de RSU en el Municipio de Oreamuno, Costa Rica.

 

Créditos: Itzel Alcerreca. Compartiendo Experiencias a nivel subnacional en México (arriba) y Costa Rica (abajo).

 

Se contó con una asistencia de 70 personas con una participación de 40% de mujeres. Los asistentes provenían de distintos sectores: financiero, técnico y promotores de proyectos, con experiencia nacional e internacional de preparación, gestión y evaluación de proyectos.

 

Créditos: Felicity. Distribución de colaboración de los participantes en el evento.

 

En el marco de la sensibilización de la gestión de RSU, el 20 de noviembre se realizó un intercambio breve entre personal interno de SHCP para identificar los mayores retos y áreas de mejora en la preparación de proyectos.

 

Créditos: Itzel Alcerreca. Compartiendo retos y áreas de mejora con distintas áreas de SHCP

 

La información del evento se puede encontrar aquí  y las presentaciones están disponibles en el siguiente enlace.

El proyecto “Convergencia de la Política Energética y de Cambio Climático” (CONECC) busca tender puentes entre el sector energético y el sector climático, y así facilitar el logro de las metas climáticas globales y nacionales. El alcance de estos compromisos requiere de un fuerte impulso al cambio tecnológico y es por eso que CONECC, en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Sustentable de Querétaro (SEDESU) y la empresa LiCore, iniciaron en febrero de 2020 el proceso de conformación del Hub de innovación tecnológica en el Estado de Querétaro.

El Hub es una plataforma de vinculación que busca impulsar el desarrollo e implementación de innovaciones que aceleren la transición energética y competitividad verde del sector productivo de Querétaro. Dado su carácter pionero en la región, se espera que la experiencia sirva como modelo a diversos esfuerzos de colaboración pública-privada para desarrollo tecnológico climático en otras entidades federativas.

Asimismo, el Hub busca fortalecer la colaboración en el entorno de innovación y emprendimiento de Querétaro, el cual comprende start-ups, PyMES, empresas grandes y corporativos, instituciones públicas y academia. En marzo de 2020, se instaló un Grupo de Trabajo para la conformación del Hub, integrado por representantes del entorno estatal de innovación y emprendimiento. El Grupo de Trabajo discutirá mecanismos de gobernanza y sostenibilidad financiera, además identificará proyectos para el inicio de operaciones del Hub.

 

Créditos: CONECC / GIZ. Reunión de Grupo de Trabajo del Hub de innovación tecnológica

 

Durante la primera reunión del Grupo de Trabajo en las instalaciones de la zona de emprendimiento “Nuqleo” en Querétaro, se analizó el proceso de constitución legal del Hub y la priorización de servicios estratégicos y líneas de acción, algunas de ellas incluyen:

  1. Aceleración y fomento de tecnologías y modelos de negocio disruptivos.
  2. Asesoría, capacitación y certificación a startups y PYMES.
  3. Acceso a laboratorios de innovación (formatos sandbox) o similares. Un sandbox orienta el desarrollo de nuevas tecnologías o modelos de negocio en un entorno de pruebas que tome en cuenta la regulación y/o legislación aplicable, principalmente promueve la innovación en materia de digitalización del sector eléctrico.

 

Créditos: CONECC / GIZ. Actores del ecosistema de innovación discuten líneas de acción prioritarias para el Hub

 

Por su parte, el proyecto CONECC proveerá acompañamiento técnico en el proceso de conformación del Hub. Esto con el objetivo de contar con opinión técnica de un equipo experto en la creación de plataformas de vinculación e innovación tecnológica y establecer una oficina de coordinación del Hub con sede en Querétaro. Se elaborará también una estrategia de comunicación para la socialización y divulgación del Hub en el entorno local y nacional.

El Grupo de Trabajo planea trabajar en la selección de proyectos concretos que, a través de un plan de acción estratégico, permita integrar exitosamente a start-ups y PyMES en el entorno de innovación. Se espera que los proyectos seleccionados reciban (1) asesorías para alinear sus propuestas a problemáticas marco del sector energético estatal y, (2) acompañamiento en su proceso de desarrollo e implementación, a través de metodologías, como design thinking o sandboxes. Se contemplan mentorías, acceso a laboratorios especializados de prueba, análisis de factibilidad comercial, vinculación a financiamiento, interrelación con empresas y experiencias nacionales e internacionales, entre otros.

 

Créditos: CONECC / GIZ. 1a Sesión del Grupo de Trabajo

 

La conformación de un Hub de innovación tecnológica en Querétaro es primordial para la reactivación económica sostenible. Este modelo de colaboración impulsa tecnologías y modelos de negocio innovadores en el ámbito de las energías renovables y la eficiencia energética. De esta forma, la acción coordinada del entorno estatal de innovación y emprendimiento fortalece la competitividad económica y acelera la implementación de tecnologías bajas en carbono.  Pronto más información.

Todas las imágenes corresponden a talleres realizados previamente a la emergencia sanitaria por COVID-19. Actualmente, las reuniones y sesiones de trabajo se realizan en formato virtual.

El pasado 14 de mayo se llevó a cabo el primer webinario sobre cambio climático en Chiapas, “Efectos económicos derivados de la contingencia COVID-19 en Chiapas”. Este encuentro fue organizado por el Consejo Consultivo de Cambio Climático del Estado, como parte de los esfuerzos por reflexionar sobre los impactos económicos que estamos enfrentando como sociedad ante la actual emergencia sanitaria.

El webinario contó con la participación de cuatro ponentes de distintos sectores, que enfocaron sus presentaciones en dos aspectos relevantes. Por un lado, compartir el contexto geográfico y las formas desiguales en las que las comunidades locales del Estado están enfrentando la contingencia. Por otro, resaltar la importancia de no ver los problemas económicos de manera sectorializada, sino con una visión de conjunto que esté articulada a la perspectiva nacional, para hacer un esfuerzo de diálogo y encontrar nuevas fórmulas de trabajo para enfrentar la etapa postpandemia.

 

Créditos: Pronatura Sur. Webinario

 

También participó del sector productivo a través de la Secretaría del Consejo Directivo de la Federación Mexicana de la Leche, quien afirmó: “Necesitamos más que nunca convertir a la ganadería sustentable en una política pública que garantice la participación de las y los productores, agentes técnicos y ONG´s en sintonía con nuestros gobiernos para poder afrontar la vulnerabilidad en la que se encuentra el sector productivo”.

El sector gubernamental estuvo representado por la Secretaría de Medio Ambiente, Energías y Desarrollo Sustentable de Oaxaca quién desde su experiencia como miembro del GFC Task Force (GCF TF) planteó que son grandes los retos que tienen los pueblos indígenas de América Latina frente a esta emergencia sanitaria pero también climática, por lo que el GCF TF está planteando una ruta de trabajo desde las instancias a nivel internacional para afrontar las incertidumbres sobre el incremento de la degradación forestal.

 

Créditos: Pronatura Sur. Webinario

 

Como parte de la transición del proyecto Implementando Estrategias de Desarrollo Rural de Bajas Emisiones que estará concluyendo en breve, Pronatura Sur estará retomando los avances logrados a través de la estrategia que el GCF TF está construyendo.

El objetivo del GCF TF es garantizar la permanencia de los bosques y los medio de vida de sus habitantes, por lo que los esfuerzos se centrarán en reducir los riesgos ambientales y sociales durante la reactivación económica post- COVID-19. La presión sobre la tierra y los riesgos de deforestación aumentarán exponencialmente si no hay alternativas económicas para los grupos más vulnerables, como las comunidades indígenas y rurales, y la población flotante debido al desempleo durante la pandemia. Por lo que esta iniciativa estará enfocando sus esfuerzos para modificar las estrategias existentes y desarrollar nuevas que permitan apoyar a sus estados miembros como lo es el estado de Chiapas, durante la recuperación económica, principalmente en el sector forestal.

La grabación del webinario está disponible aquí.

El bienestar de las personas depende, entre otros, de las condiciones ambientales. La mala calidad del aire puede aumentar el riesgo de complicaciones respiratorias durante enfermedades como el COVID-19. El monitoreo de la calidad de aire facilita la evaluación del riesgo y la toma de decisiones de política pública.

Incendios forestales y quemas agrícolas que tienen lugar en muchas regiones, entre ellas la Selva Maya, generan partículas nocivas, visibles como un humo negro, que afectan la salud humana. Los problemas respiratorios causados por estas partículas son un factor agravante para personas que están luchando contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus tipo 2, mejor conocido como COVID-19, que está terminando con la vida de mucha gente.

 

Créditos: César Paz – WCS Guatemala. Incendio en la Selva Maya

 

Para evaluar el nivel de riesgo que significa la contaminación del aire para la salud humana, es importante tener acceso a datos confiables. Por eso, el Proyecto “Fomento del monitoreo de biodiversidad y cambio climático en la Selva Maya”, financiado por el Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU) de Alemania en el marco de su Iniciativa Internacional de Protección del Clima (IKI), apoya a varios actores en la región de la Selva Maya en el monitoreo de la calidad del aire.

Para ello el proyecto apoyó la adquisición de sensores Purple Air que fueron instalados en diferentes regiones de la Selva Maya, cubriendo áreas en Guatemala, Belice y México. Estos sensores detectan partículas en el aire, cuyos niveles están disponibles públicamente y en tiempo real en el internet.

 

Créditos: GIZ/ Ameyalli Nares. Un sensor de calidad de Aire PurpleAir

 

Estos datos ya se utilizaron para mejorar las condiciones de vida de muchas personas. Después de haber confirmado un nivel peligroso de calidad de aire durante un incendio en el vertedero de San Benito, Guatemala, la municipalidad inició el proceso para un mejor manejo de los desechos sólidos. En Belice, los datos preocupantes por quemas agrícolas causaron una campaña en redes sociales. En consecuencia, el gobierno beliceño aprobó una ley que prohibió quemas durante la contingencia por el COVID-19.

Debido a estas experiencias exitosas, actores en Guatemala, Belice y también México quieren ampliar la red de sensores de calidad de aire. Eso permitirá detectar y reaccionar más rápidamente a amenazas para la salud respiratoria humana. En conjunto con otras medidas, ese enfoque ayudará a la población y tomadores de decisión de los tres países a hacer frente a la pandemia COVID-19 y posibles epidemias similares futuras.

Contacto: claudia.nares@giz.de

Más información en:

Selva maya, devorada por las llamas – La Jornada

Purple Air

Alarma por mala calidad del aire en Petén, un factor de riesgo para la población ante el covid-19

 

This morning the particle sensor recorded record smoke in the Belmopan air. The air is nearly un-breathable. See: https://www.purpleair.com

Gepostet von Jan Meerman am Freitag, 17. April 2020

A raíz del brote de COVID-19, las prioridades de atención a la emergencia sanitaria se redujeron notablemente. También los esfuerzos gubernamentales se redirigen a la protección de la ciudadanía y al combate de la epidemia sanitaria.

En un proceso de ajuste, los puntos focales en los municipios, en los bancos nacionales de desarrollo, así como en los ministerios federales (Secretaría de Desarrollo Urbano, Territorial y Urbano – SEDATU, Secretaría de Medio Ambiete y Recursos Naturales – SEMARNAT, Secretaría de Hacienda y Crédito Público – SHCP) han continuado la preparación de los proyectos.

Con el acompañamiento de FELICITY y de los actores clave, se apoya a migrar los cursos presenciales de preparación de proyectos a talleres digitales para que los funcionarios públicos subnacionales tengan continuidad de los grandes esfuerzos en materia de desarrollo de capacidades técnicas, financieras, ambientales, sociales y tecnológicas.

También se colabora con los promotores de proyectos a través de plataformas que facilitan la capacitación y la comunicación vía remota para la preparación de los proyectos. Se avanza en la asistencia técnica desde gabinete, para preparar el proceso de adquisiciones y tener la documentación requerida para la continuidad del ciclo de proyecto.

La buena colaboración entre las partes involucradas ha permitido el ajuste hacia la puesta en marcha de los proyectos, sin embargo, los principales retos en el contexto actual del COVID-19 acentúan la presión sobre los presupuestos urbanos.

La recuperación verde representa una potencial oportunidad para reducir los gastos presupuestales a través del ahorro de los costos de la energía, pero también generar más empleos de calidad y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero. La continuidad de dichos proyectos es particularmente importante en el contexto actual de una crisis sanitaria que busca la reactivación económica a corto plazo y la recuperación verde a mediano plazo.

La actual pandemia de coronavirus es una excelente oportunidad para adaptar y preparar nuestras ciudades para enfrentar mejor los retos climáticos y de salud en el presente y futuro. La aplicación Árbol IoT ayuda a las ciudades a planear y gestionar mejor el arbolado urbano. Esto ayuda a disminuir la temperatura, amortiguar los impactos de las inundaciones y mitigar las inequidades en salud asociadas con aspectos socio-económicos, entre otros.

Árbol IoT o el Internet de los Árboles es una plataforma para involucrar a los ciudadanos en el mapeo del arbolado urbano y monitoreo ambiental. Ideada y diseñada en la ciudad de Guadalajara, México, la herramienta busca empoderar al ciudadano para defender el clima y apoyar la gestión municipal del arbolado urbano. Busca mejorar las áreas verdes de las ciudades para así disminuir la temperatura y amortiguar los impactos de las inundaciones, entre otros. El objetivo de la plataforma es generar un inventario de arbolado urbano de fácil actualización por medio de la tercerización (crowdsourcing en ingles), visualizar y cuantificar los eco benéficos de los árboles, y así apoyar la toma decisiones basada en evidencia.

Árbol IoT es una multiplataforma compuesta por una aplicación móvil y web, y una red de sensores de bajo costo que permiten al ciudadano monitorear partículas contaminantes suspendidas en el ambiente, tiempo/clima, y ruido a nivel de calle. La plataforma promueve la participación, compromiso y uso a través de la ludificación verde, así como la inclusión de un amplio sector de la población, considerando a los adultos mayores. Promueve la inclusión por medio una mesa interactiva móvil que puede ser transportada y usada en el sitio por ciudadanos sin acceso a dispositivos inteligentes. También, una función ligera en la aplicación permite que ciudadanos sin o con datos móviles limitados en sus dispositivos capturen información estando desconectados sobre el arbolado y posteriormente lo carguen cuando tengan conexión WiFi.

MuCitySavior, AylluDamos y Árbol IoT, las soluciones de código abierto del Programa Global “TICs para Adaptación al Cambio Climático en Ciudades” están listas, en uso y han sido replicadas en India, Perú y México, respectivamente. Las tres soluciones digitales aplicaron al #SmartDevelopmentHack con el objetivo de acentuar la importancia de una recuperación verde. La actual pandemia es una excelente oportunidad para adaptar y preparar mejor a nuestras ciudades para enfrentar los presentes y futuros retos de salud.

Por esto, Árbol IoT se unió al #SmartDevelopmentHack como una solución digital que ayuda a las ciudades a planear y gestionar una distribución espacial del arbolado urbano mas equitativa y así mitigar las inequidades de salud asociadas con aspectos socio-económicos. El arbolado urbano ayuda a limpiar el aire, y la contaminación del aire esta asociada a problemas de salud como asma, presión arterial alta y diabetes, las cuales a su vez se cree representan un mayor riesgo en los pacientes con CIVID-19. Pandemias en el pasado como la plaga, tuberculosis, y cólera llevaron a las ciudades a transformarse, empujando la creación de áreas verdes de calidad. Por ejemplo, el diseño y construcción de Central Park en la ciudad de Nueva York se justifico en los años 1800 con la necesidad de mas áreas verdes para limpiar el aire.

La generación distribuida es un mecanismo adecuado para impulsar la reducción de costos en las empresas y organizaciones a la vez que se logra evitar la generación de gases de efecto invernadero al ambiente. Es una estrategia importante para mitigar el impacto económico derivado del COVID-19 y uno de los principales retos es encontrar mecanismos de financiamiento que aceleren la ejecución de estos proyectos en el país. Es por lo anterior que LAB Mexico impulsó el desarrollo de un taller para el financiamiento de Generación Distribuida (GD) el pasado 13 de noviembre de 2019.

Actualmente la GD fotovoltaica cuenta con una capacidad instalada en México de casi 1,000MWp representando el 1% de la capacidad del sistema eléctrico nacional, mientras que la capacidad disponible en la Red General de Distribución es de 27,000MWp. El rol de la GD es fundamental en el cumplimiento de las metas de transición energética para el año 2035.

Existe una gran oportunidad de soportar a las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, con estrategias de energías renovables que les permitan reducir sus costos energéticos, soportando la recuperación de sus economías post COVID-19.

Con base en el análisis de las discusiones realizadas entre los participantes durante el taller,  se establecieron unas conclusiones que servirán de guía para el establecimiento del plan de seguimiento e intervención con los actores claves de la industria (hoja de ruta).

 

Créditos: LAB México

 

El sector de GD no cuenta con suficiente robustez para financiar por si sólo esta transformación. La banca comercial en México es un sector sólido que cuenta con reservas, capacidades y margen de actuación para facilitar esta transición.

Sin embargo, se requiere que ambas industrias trabajen de forma conjunta en los siguientes aspectos:

  • La promoción de los beneficios de la GD fotovoltaica debe ser fortalecida en el sector PYME para incrementar la demanda de financiamiento para este tipo de proyectos. Esta promoción debe ser un trabajo conjunto de las asociaciones empresariales relevantes, así como de instituciones financieras de desarrollo, gobiernos locales y federal.
  • Se requiere facilitar el crecimiento y consolidación de la oferta de GD mediante la implementación de líneas de crédito revolvente para las empresas integradoras de GD.
  • En necesario promover otros instrumentos de financiamiento como son el arrendamiento y los contratos de compra de energía como alternativas al crédito convencional tanto en la oferta como en la demanda.
  • Es fundamental promover un ambiente regulatorio cierto y estable que facilite la inversión de capital de riesgo que experimenta con diversos modelos de negocio y financiamiento con capacidad de replicación y escalamiento. Esta es labor de la industria fotovoltaica, pero también de las instituciones financieras de desarrollo y comerciales, así como de los gobiernos locales.
  • Se debe generar información sobre el mercado y el desempeño de los proyectos de GD que permita a las instituciones financieras evaluar mejor los riesgos y generar productos acordes al perfil de riesgo de los proyectos.
  • Las instituciones financieras requieren un mayor entendimiento técnico de las propuestas de valor de los sistemas FV, sus riesgos operativos y vida útil.
  • Se deben explorar diversos esquemas de intermediación financiera con el apoyo de “gestores de activos” que faciliten la evaluación de proyectos, determinación de riesgos, la dispersión de financiamiento y la responsabilidad de la cobranza.

Como producto de este taller BID, ABM y GIZ, en conjunto con NAFIN, impulsaron la contratación de un consultor que diera materialidad a esta hoja de ruta, misma que será entregada a finales del mes de junio y que será difundida a través del BID, ABM, GIZ e IKI.

Los materiales del taller pueden consultarse en el siguiente enlace.

Las comunidades que conservan, restauran y aprovechan sustentablemente el manglar dependen de la comercialización justa de sus productos. Mundo Manglar es una estrategia que busca conectar productos locales con mercados de consumo responsable, una propuesta especialmente relevante ante la pandemia por COVID-19 y sus impactos económicos locales.

En el contexto de contingencia sanitaria ante el COVID-19, se identifica la necesidad de fomentar el consumo en mercados más justos, que favorezcan a las economías locales y a proyectos basados en el aprovechamiento sustentable de nuestros ecosistemas. Mundo Manglar es una iniciativa promocional encabezada por Pronatura Veracruz A.C. para sensibilizar al mercado sobre la importancia de los manglares y los servicios ambientales que brindan. Con el consumo responsable de productos como madera, carbón y miel se contribuye a la conservación de la biodiversidad y a dinamizar las economías locales, especialmente en ante la contingencia sanitaria global.

El proyecto “Restauración del paisaje de manglares; una oportunidad para el desarrollo social en el sitio RAMSAR Sistema de la Laguna Alvarado en Veracruz, México” (financiado por el Ministerio de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza y Seguridad Nuclear BMU, dentro de la iniciativa IKI) tiene por objetivo generar una estrategia de largo plazo para la restauración de manglares, que al mismo tiempo siente las bases para el aprovechamiento sustentable y la comercialización en mercados justos.

 

 

Los medios de vida locales que dependen directamente de los manglares han sido fuertemente impactados por la contingencia sanitaria. Actividades como la pesca o la producción de carbón, madera y miel de manglar, están concatenadas con otros sectores económicos actualmente detenidos o restringidos, como el turismo y el consumo de alimentos local.

La emergencia sanitaria requiere generar una respuesta para mitigar impactos directos y, a su vez, crear oportunidades para el fortalecimiento de los proyectos ante sus repercusiones en el mediano plazo. Analizar las cadenas de valor ante la pandemia permite identificar sus implicaciones y las acciones puntuales para dar continuidad a la comercialización de productos del manglar.

En este contexto, el sitio web y campaña Mundo Manglar cobra mayor relevancia y así mismo enfrenta importantes retos. Se requiere hacer efectiva la venta digital y los sistemas de envío, considerando el limitado acceso a medios digitales de las comunidades. Por otro lado, debemos sensibilizar al mercado para mantener e incrementar el consumo de productos con precios justos, tanto en la contingencia como ante las repercusiones en el mediano plazo por el COVID-19.

El programa de Empresas de Agua y Saneamiento para la Mitigación del Cambio Climático (WaCCliM) es implementado por la Deutsche Gesell­schaft für Internationale Zusammenarbeit  (GIZ) GmbH (Cooperación Alemana al Desarrollo Sostenible) en México, esto en coordinación directa con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA). El objetivo principal del programa es apoyar a los organismos operadores (OO) de agua y saneamiento en reducir su huella de carbono y aumentar su resiliencia climática.

El aumento en la frecuencia del lavado de manos es una de las actividades primordiales que el gobierno mexicano promueve como medida para reducir la posibilidad de contagio del virus COVID-19. Esta actividad tan cotidiana nos lleva a poner mucha más atención en el “tras bambalinas” del sector agua y saneamiento y la relevancia de contar con un sector funcional para que las personas en cualquier parte del país puedan tener acceso al agua potable en calidad y cantidad suficientes para llevar a cabo esta medida de prevención.

Las actividades del programa WaCCliM tienen una relación directa y orgánica con la recuperación sustentable (green recovery) que se vislumbra para los siguientes meses/años, entre ellas están el fortalecimiento a las capacidades del personal operativo que trabaja actualmente en los OO, mejorar los servicios de salud pública al promover el acceso a los servicios de agua potable y saneamiento a lo largo del país, impulsar y replicar el uso de tecnologías que minimicen la huella de carbono en los OO y que a su vez demanda la profesionalización del sector para proveer servicios de consultoría técnica y de implementación de tecnologías amigables con el ambiente.

El Sistema de Comercio de Emisiones (SCE) es uno de los mecanismos de precio al carbono que ha acelerado la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) durante la última década. Funciona bajo el principio de “tope y comercio”. Se impone un límite a las emisiones de uno o más sectores económicos y otorga a las instalaciones reguladas un número limitado de derechos de emisión que pueden comercializar entre ellas, para efectuar sus obligaciones de cumplimiento de manera costo-efectiva.

Existen factores que aseguran el buen funcionamiento de un SCE, entre ellos destacan la estabilidad en el precio del carbono y una oferta de derechos de emisión congruente con la demanda del mercado. La actual recesión económica derivada por el COVID-19 ha alterado estas dos variables y ha presentado desafíos importantes para los más de 20 SCE en operación alrededor del mundo. En ese sentido, es importante conocer las estrategias mundiales para solventar estos desafíos e identificar posibles lecciones aprendidas para fortalecer el Programa de Prueba del SCE en México, vigente desde enero de 2020.

Según datos de ICAP, durante marzo, en California y Quebec se observó una importante caída en el precio al carbono, así como en la Unión Europea (UE), donde descendió de un promedio de 25 euros a 15 euros. Inclusive, en Suiza se reprogramó la subasta de derechos de emisión por la baja de precios. La comercialización de derechos de emisión en el SCE de la UE se ve afectada por la sobreoferta, lo que puede ocasionar la reducción de los ingresos públicos por subastas y desincentivar las inversiones en tecnologías de mitigación.

Países como Canadá, China, Corea y Suiza han respondido ante estos impactos postergando las fechas de cumplimiento y entrega de reportes, mientras que la Comisión Europea prevé una reducción en el número de derechos de emisión disponibles dentro de la Reserva de Estabilidad de Mercado. Por otro lado, Polonia y República Checa proponen revisar las condiciones del SCE de la UE.

Las estrategias que implementen otros Estados ayudan a informar a México sobre los riesgos que enfrentan los SCE y sus posibles soluciones. El proyecto “Preparación de un Sistema de Comercio de Emisiones en México” (SiCEM), implementado por la Deutsche Gesell­schaft für Internationale Zusammenarbeit  (GIZ) GmbH (Cooperación Alemana al Desarrollo Sostenible), seguirá de cerca la evolución de la situación mundial de este sistema.

Los estados y las regiones juegan un papel fundamental para lograr la recuperación verde de la pandemia del COVID-19. Son estas jurisdicciones las más cercanas a las comunidades y quienes tienen gran oportunidad de vincular las medidas de recuperación económica con consideraciones ambientales.

El proyecto Huella Climática, el cual apoya a los gobiernos de Baja California, Jalisco y Yucatán a mejorar sus esfuerzos de reducción y seguimiento de gases efecto invernadero (GEI), ha reconocido la importancia de adaptarse ante la actual crisis. En este sentido, busca asociar la importancia de los sistemas de Monitoreo, Reporte y Verificación (MRV) en proporcionar los datos que le permitirán a los gobiernos estatales evaluar los impactos socioeconómicos y ambientales de las acciones climáticas. Asimismo, esto ayudará a resaltar uno de los resultados más importantes que hasta ahora hemos logrado visualizar, la transversalización del cambio climático.

Ante las restricciones de viaje y reuniones de grupos grandes, el proyecto se ha reinventado para lograr sus objetivos. Un ejemplo concreto es la experiencia de Jalisco y el desarrollo de una serie de webinarios técnicos con las diferentes Secretarías que forman parte del grupo de mitigación de la Comisión Interinstitucional de Acción ante el Cambio Climático del estado, como parte del fortalecimiento de capacidades que ofrece el proyecto. Durante un mes y de forma virtual, representantes de cada secretaría se han unido en grupos de trabajo para continuar la transversalización de cambio climático en sus entidades.

Créditos: The Climate Group. Webinario- Presentación Sistema de seguimiento de acciones climáticas a nivel sub-nacional con GIZ (19 de mayo).

A través de herramientas interactivas, el equipo facilitó sesiones de trabajo para desarrollar e identificar acciones e indicadores de mitigación que den paso al seguimiento de una recuperación verde futura. Un trabajo similar se realizará en los estados de Yucatán y Baja California. En paralelo, la serie de foros entre pares “Del seguimiento a la acción” iniciará próximamente para brindar otra oportunidad a gobiernos estatales de aprender de manera virtual.

 

Créditos: The Climate Group. Grupo de trabajo virtual- sector transporte Jalisco.

 

El proyecto Huella Climática es liderado por The Climate Group como secretaría de la Coalición Under2, y apoya a gobiernos estatales y regionales en México, Brasil, India y Sudáfrica. Sus principales objetivos son:

  • Proporcionar un paquete personalizado de asistencia técnica y capacitación para que los estados mejoren sus capacidades y conocimientos sobre sistemas de Medición, Reporte y Verificación (MRV);
  • Alinear los sistemas de MRV regionales con esfuerzos nacionales y locales para promover la acción climática integrada a través diálogos entre el gobierno nacional, estatal, regional y local para ayudar a alinear las acciones climáticas en todos los niveles de gobierno;
  • Fomentar el intercambio de conocimientos y reproducción de buenas prácticas a nivel internacional a través de casos de estudio, foros entre pares, entre otros.

Después de un proceso participativo multiactor, el programa CiClim apoyó el desarrollo de la estructura conceptual y metodológica para poner en funcionamiento modelos de pago por servicios ambientales en dos ciudades.

Los habitantes de León (Guanajuato) padecen de una problemática relacionada al servicio de abastecimiento de agua (90% está sobreexplotado) y sufren de la mala calidad del aire (173 días del año 2017 fuera de norma). En este contexto, el 75% de la población encuestada a través de redes sociales mostró estar dispuesta a aportar de forma voluntaria entre $2 y $15 más al momento de pagar su recibo de agua o pagar la verificación vehicular. Este financiamiento será administrado por el Fondo Ambiental Municipal ya existente y se destinará para actividades que ayuden a recuperar las áreas verdes urbanas y posteriormente al área natural protegida Sierra de Lobos, conforme se vayan aprobando los proyectos sometidos a las reglas de operación de dicho Fondo.

 

Sierra de Lobos, ANP de León Guanajuato Crédito: GIZ CiClim © 2019

 

En Morelia (Michoacán) se consideró como grave la sobrexplotación del acuífero que abastece a la ciudad y que tiene relación con el estado actual de las principales áreas naturales protegidas estatales y municipales. En esta ciudad, las encuestas (muestreo directo de la población) informaron que el 80% de los entrevistados tiene buena disposición para una aportación voluntaria de dinero, entre $2 y $12 bimestrales, cuyo enfoque sea para financiar proyectos relacionados a la conservación de las áreas protegidas. El Gobierno municipal está en el proceso de aprobación del Fondo Ambiental, para administrar los recursos y coordinar los programas planteados.

 

Rio Chiquito, ANP Morelia Mich. Crédito: GIZ CiClim © 2019

 

A la fecha de redacción de este texto, aún se trabaja en el caso de un mecanismo de compensación forestal para el municipio de Mérida (Yucatán).

Este proyecto es implementado por el Programa Protección del Clima en la Política Urbana de México (CiClim) y forma parte de la Iniciativa Internacional de Protección del Clima (IKI) del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU) de Alemania.