Visita a la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera “Manuel Cepeda Peraza”. Créditos: GIZ México.
El pasado 29 de marzo, una delegación de alto nivel integrada por representantes de tres ministerios del Gobierno Alemán visitó las instalaciones de la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera “Manuel Cepeda Peraza” en Río Lagartos para conocer su experiencia en el desarrollo del proyecto para un sistema de producción de hielo y enfriamiento con energía solar, como un esfuerzo para mejorar sus medios de vida, reducir el impacto ambiental y aumentar su resiliencia ante el cambio climático. Al encuentro se sumaron las autoridades del sector, organizaciones locales e internacionales, coincidiendo en una visión común para acciones climáticas en el sector de pesca artesanal. Esta reunión marca el inicio de una ruta para la estrategia de escalamiento de las intervenciones, apoyada por el proyecto IKI Alianza Mexicana-Alemana de Cambio Climático Fase IV de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana).
Acompañaron la visita, representantes del Ministerio Federal de Medio ambiente, protección de la naturaleza, seguridad nuclear y protección al consumidor (BMUV); Ministerio Federal de Economía y protección del clima (BMWK), de la Iniciativa Internacional del Clima (IKI), así como la embajada alemana y la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana). Asistieron también de la Coordinación General de Operación y Estrategia Institucional de la Comisión Nacional de Pesca (CONAPESCA), de la Secretaría de Pesca y Acuacultura Sustentables (SEPASY) de Yucatán, de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS) de Yucatán. También organizaciones locales que trabajan en la sostenibilidad en la región: Comunidad y Biodiversidad (COBI), Sureste Sostenible; y organizaciones del sector cooperativo, la Federación Pesquera del Oriente de Yucatán y la Confederación Mexicana de Cooperativas de Pesqueras y Acuícolas (CONMECOOP), así como del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Durante la jornada, se presentó el proyecto Hielo Solar, una iniciativa que apuesta por el uso de energía solar para la producción de hielo, esencial para conservar el producto pesquero, reducir costos y mejorar las condiciones de trabajo en comunidades costeras. Este proyecto innovador en el ámbito energético cuenta con el apoyo del Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) del PNUD, el Instituto Nacional de la Economía Social (INAES), la asesoría técnica de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana), el Instituto de Energías Renovables (IER-UNAM) y la organización Impact Blue. La propuesta busca fortalecer la autonomía de las cooperativas pesqueras frente a los desafíos ambientales y económicos actuales. La visita tuvo un carácter colaborativo y estratégico, reuniéndose autoridades mexicanas y alemanas, representantes de la sociedad civil y del sector pesquero, para discutir los retos del cambio climático, el futuro de la pesca sustentable y las oportunidades de cooperación internacional. Este espacio permitió encontrar objetivos comunes para trazar una ruta para la réplica del modelo en otras regiones del país.
Posteriormente, los participantes recorrieron las instalaciones de la cooperativa, donde conocieron de primera mano los avances técnicos, sociales y organizativos del proyecto. Se visualizó el espacio donde se instalarán los equipos de generación de hielo con energía solar, al tiempo que se compartieron los aprendizajes alcanzados por el comité de gestión local.
“Es muy importante para nosotros los pescadores del estado de Yucatán, que es una región muy vulnerable por los huracanes, contar con este tipo de tecnologías para cuidar el medio ambiente y no afectar el clima global, como el recalentamiento del agua, que nos permita la pesca sustentable para beneficio de nuestras familias”.
Romel Alcocer de la Federación Pesquera del Oriente de Yucatán.
Cambio climático y vulnerabilidad pesquera
Uno de los puntos más relevantes de la jornada fue la reflexión conjunta sobre la vulnerabilidad de las comunidades pesqueras artesanales ante el cambio climático. En zonas costeras como Río Lagartos, el aumento en la temperatura del mar, la acidificación, los fenómenos meteorológicos extremos y la pérdida de biodiversidad están teniendo impactos severos sobre los recursos marinos y las condiciones de pesca. Esta realidad agrava la incertidumbre económica de las cooperativas, que ya enfrentan desafíos estructurales como acceso limitado a tecnologías, fluctuaciones del mercado, falta de infraestructura de frío y ausencia de financiamiento. En ese sentido, el proyecto Hielo Solar no solo representa una mejora tecnológica, sino una herramienta clave de adaptación climática y fortalecimiento de la resiliencia comunitaria.
Además de los beneficios técnicos y ambientales, la iniciativa genera valor social al fortalecer la organización interna de la cooperativa, promover el liderazgo local y construir capacidades para una toma de decisiones más autónoma e informada.
Visita a la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera “Manuel Cepeda Peraza”. Créditos: GIZ México.
Hacia una transformación replicable
La visita culminó con un recorrido en lancha por los manglares de la zona, donde se destacó la riqueza ecológica del territorio y el compromiso de la cooperativa con su protección. El intercambio dejó claro que este tipo de experiencias pueden ser el punto de partida para una transformación a mayor escala del sector pesquero artesanal en México, si cuentan con el respaldo institucional y financiero necesario.
Con apoyo de aliados nacionales e internacionales, el proyecto Hielo Solar se consolida como un ejemplo de acción climática local con visión global, y como una inspiración para otras comunidades costeras que enfrentan los mismos retos.
Visita a la Sociedad Cooperativa de Producción Pesquera “Manuel Cepeda Peraza”. Créditos: GIZ México.