México y Alemania profundizan su colaboración en materia de cambio climático e inician un programa específicamente enfocado en la preparación de un sistema de comercio de emisiones (ETS, por sus siglas en inglés) como instrumento costo-eficiente de mitigación.
México se encuentra actualmente analizando el establecimiento de diversos instrumentos de mitigación al cambio climático, entre ellos el establecimiento de un ETS, para el logro de su Contribución Nacionalmente Determinada (NDC).
Para apoyar al gobierno mexicano en el desarrollo e implementación de este sistema, la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable (GIZ) lanzó en septiembre del 2017 el programa “Preparación de un Sistema de Comercio de Emisiones (ETS) en México”. Este tendrá una duración de tres años y apoyará al gobierno mexicano mediante tres líneas de acción: 1) recomendaciones técnicas para el diseño del ETS; 2) gestión y acompañamiento de partes interesadas del sector público y privado, así como de la sociedad civil; y 3) la difusión e intercambio de experiencias a nivel internacional. Este programa es implementado por la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH, organismo de cooperación al desarrollo del gobierno alemán, mediante fondos de la Iniciativa Internacional de Protección del Clima (International Climate Initiative –IKI). Desde 2008, la IKI del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza, Obras Públicas y Seguridad Nuclear (BMUB) del Gobierno Alemán, ha financiado proyectos de cambio climático en países de desarrollo y emergentes, así como países en transición.
Un ETS es una herramienta de mitigación al cambio climático con base en el mercado. Consiste en establecer un límite máximo de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), dentro del cual las empresas comercializan derechos de emisión. El objetivo es que con el tiempo se reduzcan las emisiones al incentivarse la inversión en tecnologías limpias y bajas en carbono. En ese sentido, la colaboración entre varios actores del sector público y privado es indispensable.
Los gobiernos de México y Alemania acordaron colaborar en esta materia en las negociaciones intergubernamentales que se llevan a cabo anualmente. Alemania participa en el ETS europeo, que es hasta la fecha el más grande del mundo. La colaboración entre ambos países busca precisamente aprovechar las buenas prácticas de Alemania y otros países para la toma de decisiones en México.
México cuenta con experiencia en diferentes mecanismos de fijación de precios a cierto tipo de GEI, como el que se aplica desde 2014 sobre el contenido de carbono de los combustibles fósiles. Asimismo, próximamente desarrollará un ejercicio de mercado con el objetivo de simular la operación de un ETS en el país que familiarice principalmente al sector privado con el funcionamiento de este sistema.
Los fundamentos legales para el establecimiento de un ETS en México se encuentran en la Ley General de Cambio Climático, la cual faculta directamente a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) para su desarrollo e implementación. Actualmente se desarrollan los instrumentos institucionales, técnicos y de capacidades pertinentes para el establecimiento de un piloto de este sistema en 2018, con miras a su completa operación hacia el 2020, año en que comienza la aplicabilidad del Acuerdo de París.