El 1 de octubre de 2019, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) publicó las Bases Preliminares del Programa de Prueba del Sistema de Comercio de Emisiones (SCE). Este sistema, desarrollado con apoyo de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable) por encargo del Ministerio Federal Alemán de Medio Ambiente (BMU), es un instrumento clave para el cumplimiento de los compromisos climáticos sectoriales de México y para el desarrollo bajo en carbono.
Las Bases Preliminares detallan algunos de los elementos de diseño con los que contará el Programa de Prueba de 36 meses de duración. Con ello, se espera una mayor generación de empleos de calidad y una mitigación costo-efectiva de emisiones de los sectores regulados. En conjunto, las emisiones cubiertas por el Programa de Prueba corresponden a 40% del Inventario Nacional de Emisiones de Gases y Compuestos de Efecto Invernadero.
¿Cómo va a operar el Programa Prueba según lo estipulado en las Bases Preliminares? El Sistema funcionará bajo el principio de “tope y comercio”. En México, el gobierno otorgará, de manera gratuita y con base en las emisiones históricas, una cantidad de derechos de emisión (DEM) a las instalaciones reguladas. Estos DEM corresponden a una cantidad proporcional de emisiones directas de CO2. Esto significa que, si reducen sus emisiones, las entidades reguladas pueden comerciar estos derechos, creando un mercado de DEM y propiciando la mitigación más eficiente. Al mismo tiempo, al topar la cantidad global de emisiones a través del número total de DEM otorgados, el gobierno asegura una reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en línea con sus objetivos ambientales.
En México, únicamente participarán instalaciones del sector industrial y del sector energía que hayan reportado emisiones mayores a 100,000 tCO2 en 2016, 2017, 2018 o 2019, lo que representa alrededor de 300 unidades. Para llevar un control sobre las transacciones y la tenencia de los DEM, la SEMARNAT creará un Sistema de Seguimiento que llevará registro de las operaciones. Además, cada instalación deberá de crear un Plan de Monitoreo con base en la guía que publicará SEMARNAT. Con ello, se intenta establecer un sistema justo y transparente de comercio.
Al final de cada periodo, cada instalación debe de contar con el mismo número de DEM que de emisiones. Estas emisiones serán verificadas por terceros independientes, dando solidez al sistema. Además, de manera limitada, se podrán utilizar créditos de compensación generados en proyectos de reducción de emisiones fuera de los sectores regulados para estar en cumplimiento, lo que flexibiliza el sistema. A pesar de que el Programa Prueba no contempla sanciones económicas, por cada DEM faltante, se descontarán dos en la primera asignación de la Fase Operativa (posterior al término de los 36 meses de la Prueba Piloto). Esto incentiva a que las empresas estén en cumplimiento sin generar un fuerte impacto sobre su competitividad.
Las Bases Preliminares sientan los cimientos para el establecimiento formal de un SCE en México. Esto contribuirá a la reducción de GEI en el país y traerá importantes co-beneficios, lo que propiciará un crecimiento económico respetuoso con el ambiente. Si quieres conocer más acerca de este instrumento, consulta el folleto informativo adjunto.
