El 25 de septiembre de 2019 se llevó a cabo en Flores, Guatemala, el Taller anual del Grupo Regional de monitoreo de cuerpos de agua y fauna asociada en la Selva Maya (MASM), cuyo objetivo es utilizar el monitoreo estandarizado de cuerpos de agua y fauna asociada como un indicador del estado de conservación de la biodiversidad y cambio climático en la región, para después generar recomendaciones de manejo y conservación en la toma de decisiones.
Durante el taller se expusieron experiencias de quienes trabajan en la Selva Maya, compartida por Guatemala, México y Belice; también se discutieron recomendaciones de manejo y conservación de los cuerpos de agua en la región. Derivado de las discusiones se concluyó que entre 2018 y 2019 las aguadas han presentado una situación crítica, al registrarse que más del 90% de las mismas permanecen secas en comparación con otros años; esto coincide con un incremento en el número de animales encontrados muertos en la región (i.e. tapir y pecarí de labios blancos).
Por otro lado, se advierte sobre las amenazas que la reducción de agua y humedad en la Selva Maya pueden generar, entre ellas, el incremento de incendios originados por actividades ilicitas y agropecuarias, el aumento en los conflictos entre animales silvestres y humanos, y la disminución de ingresos por actividades sostenibles, como el ecoturismo, apicultura, agroforestería, entre otras.
El apoyo para la conformación de este Grupo Regional, así como para la ejecución de algunas capacitaciones y las reuniones anuales, hacen parte de una de las líneas de trabajo del proyecto Fomento del monitoreo de biodiversidad y cambio climático en la región Selva Maya, de la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable (GIZ).
Contacto: Gabriela Ponce gponce@wcs.org