La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, con apoyo de la GIZ, avanza en el uso sustentable y conservación de la biodiversidad de México a través de mejoras en la política y los programas gubernamentales del sector agrícola, y del intercambio de experiencias entre productores, autoridades y organismos internacionales.
Durante las últimas décadas el cambio de uso de suelo de casi 60 millones de hectáreas de selvas, pastizales y bosques templados para uso agrícola y pecuario puso en riesgo a una gran cantidad de especies, disminuyendo la capacidad de los ecosistemas del país para asegurar la provisión de servicios ecosistémicos. La transformación de los ecosistemas supone un riesgo para la producción de alimentos y el sector agropecuario mexicano, ya que 88 por ciento de las 130 plantas cultivadas en México dependen para su producción de los servicios que proveen los ecosistemas, cual como la polinización realizada por insectos, aves y mamíferos[1].
Para atajar este grave problema el proyecto Integración de la Biodiversidad en la Agricultura Mexicana (IKI IBA), contribuyó a la creación y puesta en marcha del Centro de Integración de la Biodiversidad de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (CIB-SAGARPA), el cual funcionará como un espacio de cooperación interinstitucional que ayude a disminuir los impactos de las actividades agropecuarias sobre los ecosistemas.
Asimismo, contribuye a cumplir los compromisos del gobierno mexicano relativos a la conservación y uso sustentable de la biodiversidad en las actividades productivas del sector alimentario, establecidos en la 13ª Conferencia de las Partes del Convenio sobre Diversidad Biológica, al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y a lograr los Compromisos de Mitigación y Adaptación ante el Cambio Climático para el periodo 2020-2030.
Por otro lado, el proyecto realizó del 7 al 9 de mayo de 2018 el Primer Encuentro Nacional de intercambio de conocimientos y saberes de productores rurales que integran la biodiversidad en sus actividades productivas para impulsar la colaboración entre organizaciones sociales, instituciones de gobierno, grupos académicos y organismos multilaterales.
En el encuentro se analizaron los factores de éxito de experiencias agrícolas que han incorporado mejores prácticas para la conservación de suelos, agua, y biodiversidad, en cadenas productivas como cacao, maíz, café, frutales y miel, con el objetivo de identificar lecciones aprendidas y recomendaciones de mejora para la política agropecuaria nacional.
Además, las instituciones participantes establecieron contacto directo con más de 30 representantes de organizaciones regionales de productores con los cuales se espera próximamente impulsar prácticas agrícolas sostenibles y fortalecer las cadenas productivas existentes.
El proyecto Integración de la Biodiversidad en la Agricultura Mexicana es conducido por la Cooperación Alemana para el Desarrollo Sustentable (GIZ), por encargo del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Protección de la Naturaleza y Seguridad Nuclear (BMU) de Alemania como comitente, tiene como contraparte a la SAGARPA y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y como socios el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (ONU Medio Ambiente) y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Correo de contacto: proyecto.ikiiba[AT]giz.de
[1] Ashworth, L. et al. (2009). Pollinator-dependent food production in Mexico. Biological Conservation 142, 1050–1057).