Se realiza primer taller de resultados
El establecimiento de un Sistema de Comercio de Emisiones (SCE) conlleva el análisis de aspectos como las implicaciones en materia de competitividad y riesgo de fugas de carbono. Por lo anterior, SEMARNAT, con GIZ y un equipo de expertos nacionales e internacionales realizan un estudio para medir la competitividad de las empresas en este contexto.
Para el establecimiento de un SCE, se vuelve prioritario tener en cuenta los posibles efectos económicos a nivel nacional e internacional, tanto en su diseño como implementación. De acuerdo a la reciente reforma a la Ley de Cambio Climático las bases preliminares, que contendrán el fundamento del SCE en su fase piloto a publicarse en el 2018:
¿De qué forma puede verse afectada la competitividad de una industria?
El régimen de fijación de precios al carbono persigue enfoques individuales a nivel nacional y subnacional. Esto puede conducir a la fijación de distintos precios de carbono entre jurisdicciones, y puede generar diferencias en los costos de cumplimiento para la misma industria en diferentes ubicaciones. Por lo tanto, podría darse el caso en que la fijación de precios de carbono pudiera conducir a que la producción de una compañía, se traslade a jurisdicciones con una política de reducción de emisiones menos rigurosa, conocido como fuga de carbono. Ésto implicaría que el precio del carbono ha afectado la competitividad nacional y, al mismo tiempo, ha reducido poco o nada las emisiones a nivel global, siendo un escenario no deseable.
En este contexto, se ha iniciado el análisis de sectores que serán potencialmente cubiertos por el SCE. A través de dos tipos de análisis arriba-abajo (top-down) y abajo-arriba (bottom-up), se está tratando de modelar el impacto que se pudiera presentar por la introducción de un SCE en el país. El primer análisis enfocado a presentar los resultados del impacto a un nivel macroeconómico que tendría la introducción del ETS en variables como el Producto Interno Bruto (PIB), Comercio y Valor Agregado Bruto (VAB), mientras que el segundo análisis se enfoca en un nivel sectorial. El objetivo es medir la competitividad de las industrias mexicanas, haciendo especial énfasis en el riesgo que implica la “fuga de carbono”.
Para el desarrollo de dicho análisis, se ha contado con el apoyo de expertos internacionales y nacionales en materia de competitividad (Vivid Economics y el Instituto Mexicano para la Competividad – IMCO, respectivamente) y, los resultados preliminares fueron presentados en un taller celebrado el 19 de abril de 2018 en las oficinas de SEMARNAT. Éstos resultados muestran el potencial de aplicar un precio al carbono y al mismo tiempo asegurar la competitividad económica de la industria mexicana. Al mismo tiempo, se hizo hincapié en no haber evidencia de fuga de carbono en otras jurisdicciones analizadas. El taller contó con la asistencia de alrededor de 20 participantes, representado sectores como el químico, acero, cemento y papel. El análisis está siendo elaborado para la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), en el marco del Proyecto “Preparación de un Comercio de Emisiones en México (SiCEM)” de la Deutsche Gesellschaft für Intrenationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH, realizado por encargo del Ministerio de Medio Ambiente de Alemania (BMU).
Como siguientes pasos, se buscará crear espacios de diálogo por sector que permitan enriquecer los hallazgos del presente estudio, y abordar directamente las inquietudes de las partes interesadas. Cabe recalcar, que el estudio no tendrá un efecto en la fase piloto del SCE, sino busca iniciar los trabajos en preparación a la implementación de la etapa formal del sistema.
Para mayor información sobre este tema, favor de contactarnos en: comercio.emisiones-MX@giz.de
