En México, las empresas comunitarias, sociedades cooperativas y organizaciones similares enfrentan retos significativos debido a los impactos del cambio climático, que afectan tanto sus actividades productivas como los territorios que habitan. Estas organizaciones, que también desempeñan un papel crucial en la conservación de la biodiversidad, requieren herramientas efectivas para diseñar soluciones climáticas y acceder al financiamiento necesario para implementarlas.
Durante 2024, el programa de mentoría FinTank, ejecutado por la Alianza Mexicana – Alemana de Cambio Climático de la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH (Cooperación Técnica Alemana), en cooperación con Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) e Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC), brindó asesoría técnica a 30 organizaciones en el diseño de soluciones climáticas relacionadas con energía distribuida comunitaria y Adaptación basada en Ecosistemas (AbE).
Biodiversidad en manglares de Ria Lagartos. Yucatán. Créditos: GIZ México – Lishey Lavariega.
Algunos avances a la fecha son:
- Financiamiento en la Sierra de Vallejo (Jalisco-Nayarit): Se lograron compromisos por 20 millones de pesos del sector privado turístico para implementar acciones de AbE y conservación de biodiversidad en ejidos de la región, con una proyección a cinco años.
- Energía solar para pesca sustentable en Yucatán: En coordinación con el Programa de Pequeñas Donaciones del PNUD, se avanza en el financiamiento de una planta de hielo con energía solar para una cooperativa en Río Lagartos, que fomenta la pesca sustentable y la participación de mujeres y jóvenes.
Ejidos, sector privado y gobierno durante la planeación de acciones en Sierra de Vallejo. Créditos: Comisión Nacional Forestal (CONAFOR).
Adicionalmente, en el sector financiero de la Banca Social y Solidaria y en colaboración con el Instituto Nacional de la Economía Social (INAES), se capacitaron 31 Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (SOCAP) de la región sureste en el diseño de productos financieros sostenibles y solidarios que respondan a los retos del cambio climático y promuevan la conservación de la biodiversidad. Este esfuerzo dejó materiales y lecciones aprendidas que permitirán replicar estas estrategias en otras organizaciones del Sector Social de la Economía.
Estos avances demuestran cómo las alianzas estratégicas y el enfoque en soluciones climáticas pueden generar beneficios tangibles para comunidades, ecosistemas y sectores clave de la economía en México.
Socios de la cooperativa pesquera durante la planeación de la Planta de hielo con energía solar. Créditos: GIZ México – Lishey Lavariega.