En un intercambio internacional realizado en Bonn, se discutió la importancia de las contribuciones del sector privado a las inversiones climáticas así como las nuevas tendencias globales para el régimen global de cambio climático.
El evento de arranque de Diálogo de Inversiones Climáticas (Practitioners’ Dialogue on Climate Investments), se llevó a cabo el pasado 9 de junio en la Ciudad de Bonn, Alemania con una tarde de panel de debate bajo el lema “it’s the economy! Smart policies for climate investments”. El proyectoglobal que la Deutsche Gesellschaft für Internationale Zusammenarbeit (GIZ) GmbH implementa por encargo del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo de la República Federal Alemana (BMZ), busca facilitar el intercambio sobre instrumentos adecuados de política pública y enfoques innovadores impulsados por el sector privado que contribuyan a la inversión climática en contextos nacionales y regionales diferentes. Se tiene previsto una serie de diálogos regionales entre el 2015 y el 2016, previendo un evento en América Latina y el Caribe para el 2016. El evento de arranque también fue concebido como contribución y parte de las actividades de las negociaciones preparatorias para la próxima Conferencia de las Partes (COP 21) a realizarse en París, Francia.
Con una interesante intervención de Dirk Messner, Director del Instituto Alemán de Política de Desarrollo (DIE, Deutsches Institut für Entwicklungspolitik), se resaltaron algunos puntos importantes en el marco de las últimas negociaciones del Grupo de los Siete (G7):
- Se vislumbra una des-carbonización total hacia el 2100 y probablemente se anticipe para el 2070.
- Noruega (hasta el momento principal inversionista en carbono), respaldará tanto en inversiones públicas como privadas, una salida total de los financiamientos de carbono.
- Los subsidios al carbono ascienden en el momento a una cifra de 5.3 billones de dólares.
- La compañía British Petroleum (BP) ha comenzado a tomar medidas para hacer frente a este punto de inflexión y con miras a los próximos 40-50 años.
- El Gobernador del Estado de Colorado, Bill Richard, y quien es consejero en temas de energía al Presidente Obama, sugiere realizar cambios fundamentales en las actividades locales y regionales, y sobre todo en financiamiento de combustibles fósiles.
- El mundo debe encontrar esquemas de incentivos para promover y fortalecer las políticas energéticas de bajo carbono.
En la actualidad las nuevas tecnologías de información y comunicación tienen gran potencial para difundir de forma acelerada la información y conocimientos relacionados al cambio climático y desarrollo sustentable. Se enfatizó que la política debería aprovechar este potencial para crear un marco favorable de aprendizaje y financiamiento para lograr la meta de mantener el calentamiento global por debajo de los 2°C.
Por su parte, Joachim Prey, Director General del Departamento Sectorial de la GIZ en Alemania, enfatizó que en el mundo hay una inclinación por la promoción de políticas públicas ambientalmente amigables. Sin embargo, todavía se observan contradicciones en las inversiones públicas y privadas que no han permitido un cambio real. Sobre todo invitó a reflexionar sobre los subsidios a las nuevas tecnologías. Por ejemplo, para el caso de la transición energética en Alemania, tanto los productores como los consumidores tuvieron que enfrentar y aceptar pérdidas. Para esto es importante que nuestra mentalidad como “sociedad de cambio” acepte los niveles de riesgo y la necesidad de compensaciones para buscar esta transición global.
En el auditorio hubo participación tanto de representantes del sector privado, por ejemplo bancos centrales de varios países y bancos de segundo piso, como también de instituciones de la gestión pública y de agencias de cooperación. Muchas voces de participantes se inclinaron a rescatar el momento prometedor para las negociaciones globales para un nuevo acuerdo marco del clima. Pero no faltaron también voces menos optimistas y más críticas respecto a los avances reales en la mitigación de gases de efecto invernadero.
El panel de debate se llevó a cabo Collegium Leonimun y fue organizado por el BMZ, y la GIZ en colaboración con el DIE.