Las naciones se pusieron a hablar del cambio climático, cuando llegó una calavera dando de cabezazos. Les dijo yo soy la muerte, no entiendo de fronteras y para que se den cuenta de eso… Ahí les van unos trancazos. Llegaron huracanes, ciclones e inundaciones y se llevaron entre las patas, todos los rincones. Entonces llegó un güero y dijo: hagamos algo, tomemos medidas, mitiguemos el cambio. Sin pensarlo dos veces la Alianza México- Alemana crearon.
Llegaron a los estados e implementaron medidas, la gente de los pueblos mientras trabajaban decían: estos alemanes NAMA están reduciendo gases, ¿será que es bueno? habrá que hacerles caso.
La parca estaba de juguetona por lo que quiso ponerles trabas, pero no contaba con el expertise de los enviados: todos los Andreas incluido Gettkant, el monitoreo de Jakob aunque ya no está…
Había NAMAS para todo, transporte, PyME, vivienda y hasta facility… Todos con en enviados sin olvidar al personal mexicano que nunca los dejaba fallar.
La muerte se quedó perpleja ante tanto trabajo por lo que les dijo: Chavos. Los veo en 4 años, terminen sus proyectos, hablamos al rato y mientras tanto al mundo sigan cuidando.